Virgo es más prominente durante la primavera. Es la segunda constelación más grande del cielo después de la Hidra. Alberga numerosas galaxias que es posible observar incluso con telescopios pequeños debido a su corta distancia hasta la Via Láctea.
En la mitología griega, Virgo se identificaba con la diosa virginal Astrea, hija de Zeus, o con Perséfone, casada con Hades, e incluso con Erígone, hija de Dioniso, la cual se suicidó tras conocer la muerte de su padre y pasó a convertirse en una de las constelaciones del cielo primaveral.
La constelación de Virgo es célebre por las muchas galaxias que contiene, unas 40 de las cuales pueden contemplarse con ayuda de pequeños telescopios.
La galaxia del Sombrero, M104, que toma este nombre por su parecido con el típico sombrero mexicano. Se caracteriza por la densa banda de polvo que divide en dos la galaxia a lo largo de su ecuador. Está situada a poco menos de 30 millones de años luz de nosotros.
M87 es una galaxia «monstruosa» con una masa equivalente a un billón de masas solares y con un diámetro un 20 % mayor que el de la Vía Láctea. Se cree que alberga en su interior un enorme agujero negro con una masa equivalente a más de 6000 millones de Soles. También se conoce como galaxia Virgo A, ya que se trata de una potente radiofuente.